martes, 16 de diciembre de 2008

Transformándome a mí misma, transformo el mundo


Concha PinósConcha Pinós es activista de distintas causas, en particular en los últimos años por la de la liberación en Birmania.

Koldo Aldai

Concha Pinós. Estudiosa y practicante del yoga tibetano, su búsqueda se inició en Granada en su tiempo de universitaria en la facultad de Ciencias Políticas. Allí conoció a un maestro hindú que había sido discípulo de Paramahansa Yogananda. Concha le preguntó que quién era, a lo que él respondió: “Lo importante no es quién soy yo, sino quién eres tú. Tú puedes ser la madre de millones de personas…”

El maestro le enseñó yoga, según el método de “gurukula”, es decir de convivencia con el “gurú”. Mientras en la facultad aprendía Ciencias Políticas, con el “gurú” aprendía los yoga sutras de Patanjali. Después conocería a una monja tibetana que fue la que finalmente le animó a dar el salto a Oriente. Concha se reconoce cómplice de la respiración mundial, del sonido del universo. Fuertemente comprometida con aliviar el dolor de la tierra, afirma que cuando va a las guerras siente que el sufrimiento de los demás y el suyo propio es el mismo. Entrevistamos a Concha en el I Foro Humano Europeo, que ha tenido lugar en Barcelona la primera semana de noviembre.

¿Agradecida con tu maestro? 
Los maestros tienen la virtualidad de conectarnos con nuestra luz. Así iluminados por nuestra propia luz, podemos crear más cosas…

¿Qué aportó el yoga a tu vida? 
El yoga no es una clase dos veces por semana, yoga es simplemente estar despierto. Patanajali era un médico, mago, activista, bailarín…, era todo eso. Era un yogui, no había dualidad en sus acciones. Un yogui es alguien que afronta la realidad y la transforma para el beneficio del máximo de seres. En el budismo el equivalente sería un Bodisatva. Hemos de tener la mentalidad de convertirnos en un ángel que ayude al máximo de seres. Aspirar a que todos se salven antes que tú. Esa es la promesa del Bodisatva. El Bodisatva es quien da la vida por los demás.

¿Y el yoga tibetano que aporta de añadido? 
Tiene su origen en las cuevas de Afganistán. Se dice que allí fueron a parar unos yoguis que vinieron del espacio y que conocían la técnica de convertir el cuerpo físico en un cuerpo de luz. Esos yoguis emigraron al Himalaya y enseñaron 84 formas de yoga. Penetraron toda la India y su enseñanza se fusionó con la de la meditación de Sidharta Gautama, el Buda histórico. El yoga tibetano hereda pues, tanto la tradición yóguica, como la enseñanza de la meditación de Buda, como el chamanismo de los Himalayas.

Pregonas impermanencia por todo el mundo… 
Es preciso asumir el principio de la transitoriedad o impermanencia. ¿Cómo afrontamos la muerte o la desaparición de las cosas o personas que supuestamente creemos que son nuestras? No tenemos nada. En la última realidad sólo somos luz, energía de amor. El peligro es que cuando tomamos forma, nos identificamos en exceso con esa forma. Nos identificamos con una persona, con un país… Ese es el error de la mente. Ahí emerge el ego y el consiguiente dolor tan difícil a veces de transformar. Ahí es necesario hacer un trabajo.

Concha Pinós
Concha Pinós durante la entrevista
Trabajo titánico, por cierto… 
Hay un fase de apego y sufrimiento, pero hay también otra en la que podemos reconocer nuestra mente iluminada y nuestra condición de potenciales Budas. Tú eres en un comienzo un Buda. El mundo sufre, pero en el fondo todos estamos iluminados.

¿Cómo te entrenas en el desapego? 
El entrenamiento va muy bien en la educación de la destrucción de lo innecesario. Ahora que viajo tanto me he acostumbrado a llevar lo imprescindible. Necesito poco para vivir. Cada día me siento más ghandiana. ¿Si necesitamos tan pocas cosas, por qué acumulamos tantas? Estoy en un proceso de socializar lo que tenía, libros, películas… El sufrimiento en la vida viene del sentimiento de querer quedarnos con cosas y personas.

¿El sentido de la impermanencia está ligado al de la compasión…? 
Compasión también puede ser abandono de lo construido. Hay varias fases en lo que creamos: pensar hacer algo bueno, la segunda es hacerlo realidad, poner en movimiento ese algo bueno, la tercera es de mantener ese algo bueno y la cuarta es dejar ese algo bueno para crear algo nuevo. Esto es la compasión de la transformación. El ciclo se cierra a la de cuatro. A la de cuatro tiene que ser otra cosa. Ello impide el apego, el hacer siempre las mismas cosas. Las cosas nacen y mueren y sin embargo nos seguimos apegando.

¿Puedes explicarnos el sentido budista de la vacuidad? 
Cuando estamos en profunda comunión con las personas podemos tocar su corazón y experimentar que todos somos iguales, experimentar el gozo de la unión. La vacuidad en menor grado al menos la experimentamos tres veces en nuestra vida, con la muerte, con el nacimiento y el orgasmo. Sin la sexualidad eliminamos el proceso de creación.

¿Hoy es más difícil que ayer el reto de la compasión? 
No podemos pensar que los problemas que atraviesan otros pueblos, les atañen en exclusiva. Hemos de tomar más responsabilidad sobre nuestra interdependencia. Hemos de saber qué acciones hemos causado nosotros, para que se den ese tipo de situaciones. Hoy podemos, gracias a las nuevas tecnologías, hacer por los demás más cosas que en el pasado.

¿Cómo hacemos espacio a la compasión en nuestros corazones? 
Desde una perspectiva budista, cuando hemos eliminado la suficiente cantidad de sufrimiento en nuestras vidas, podemos empezar a experimentar amor y compasión.

Todos los seres sufrimos. Lo primero que debemos hacer es enfrentarnos con nuestro propio sufrimiento. Todos tenemos una historia de sufrimiento. Hasta que no seamos capaces de vencer esa historia de sufrimiento, la ira y el dolor que llevamos dentro, “no way”, ni yoga ni nada…

¿Por lo tanto, limpieza interior antes de saltar al mundo? 
Evidentemente. Con dolor no puedes servir. Si vamos a un conflicto y llevamos nuestra ira y nuestra rabia no podemos ayudar a muchas personas, porque lo único que haremos son proyecciones de nuestro propio sufrimiento. Es preciso coger al toro por los cuernos, es preciso decir al sufrimiento. “yo no quiero sufrir”, es preciso ir a las causas raíces que me causaban sufrimiento y trabajar sobre ellas. Transformándome a mí misma, en realidad transformo el mundo. Somos todos interdependientes.

¿Cómo vives tu doble condición de activista por los derechos humanos o agente de cambio y guía espiritual? 
Sólo soy un ser humano que vive la interdependencia. Quiero trasformar el mundo con las herramientas que conozco. ¿Cuáles son esas herramientas? El yoga, la meditación, la resolución de los conflictos desde una acción compasiva y a la vez activa... La gente piensa que los budistas estamos todo el día sentados en un cojín de meditación. Sin embargo a veces no nos queda otra que meditar en los caminos, los aviones…

Cuando uno ve una ley injusta se ha de levantar. No importa si eres budista o eres activista. Lo que importa es si te puedes mantener en una actitud no violenta, de “ahimsa”, superando un impulso violento que te lleva a la dualidad.

¿En cuanto que budista comprometida, cómo contemplas el reto de mantener la paz en estos tiempos convulsos que atravesamos? 
En palabras del Buda, nuestra misión más definida es acabar con el sufrimiento de las personas. Siempre ha habido guerras y crisis. La crisis es una oportunidad para reflexionar sobre las cuestiones que no funcionan dentro de nosotros. El salto a la nueva humanidad pasa por un trabajo personal. Por grandes que sean las crisis planetarias, nuestros verdaderos retos estriban en erradicar nuestro propio, egoísmo, codicia ignorancia…

En ese sentido el budismo, al igual que las otras grandes religiones, ofrece una serie de herramientas que nos convierten en seres más equilibrados. No importa tanto el tipo de herramientas que utilizas, como el fruto de las mismas. Es decir, si te conviertan en un ser más equilibrado y que te permitan aportar a la sociedad tu cuota de bienestar y felicidad.

¿Y cómo venciste el sufrimiento…? Hasta donde se pueda saber… 
Por supuesto… La mía es una historia pública. Me he enfrentado a dos cánceres y también a batallas de fuera con mucha paciencia y trabajo interno. Si lo he hecho yo, lo puede hacer cualquier ser humano, pues no hay ninguna diferencia entre nosotros y los demás.

Tu vida es un sendero de imposibles: victoria sobre el cáncer, pérdida de tu hijo… 
Cree en las cosas imposibles. Cree que tu mente es una mente iluminada, cree que tienes el potencial de un Buda, que realmente puedes ser un Bodisatva. Cree que puedes ser un Bodisatva. Si no crees que puedes erradicar el sufrimiento, no hay chispa…

¿Servicio y espiritualidad serían sinónimos? 
Absolutamente. Hay una primera fase en la que el ser humano comienza a reflexionar sobre las cuestiones fundamentales de su época. Hay una segunda fase de toma de compromiso y una tercera de paso a la acción. No podemos pasar el día en la disyuntiva de diamante rallado o roto, Oriente u Occidente, yoga o tai-chi… No queremos nada de eso. Queremos reflexión, conciencia y acción.

Cristianismo comprometido, budismo comprometido… ¿El compromiso se acrecienta en el seno de las comunidades espirituales…? 
La energía de Jesús y de Buda es la misma energía de vacuidad y de compasión en acción.

El budismo comprometido en la línea de Thich Nhat Hahn, su Santidad el Dalai Lama o Aung San Suu Kyi, no es diferente a lo que pregonó el Maestro Jesús o la Madre Teresa de Calcuta, o el propio Mahoma cuando decía a los hombres que era preciso defender a las mujeres y los niños. Después son nuestros egos los que pueden llegar a transformar las palabras de los maestros. Un yogui trata de ser fiel a la esencia del mensaje y actúa. No es alguien que se queda impasible en una cueva. No es tiempo para quedarnos en una cueva.

¿Por qué Birmania? 
¿Por qué no Birmania? Birmania es la metáfora de la tierra pura, la tierra en la que quisiéramos vivir. Birmania es un arquetipo que necesita ser liberado. Birmania representa 135 minoría étnicas, una mujer como Aung San Suu Kyi con una propuesta política, espiritual y económica única y liberadora. Hay una constitución federada que se puede poner en marcha… Birmania tenía todos los elementos que para mí, como revolucionaria interna, representan lo que creo que puede ser el mundo.

¿Hay esperanza para Birmania? 
La esperanza no la ganamos, ni la perdemos nunca, porque es la cualidad intrínseca de nuestra acción. Los militares entrarán en razón.

Proyectos? 
Mis proyectos son servir y servir. Donde pueda servir, ahí voy a estar.

Cortesía de Fundación Ananta

domingo, 14 de diciembre de 2008

Para comprender la muerte, hay que entender la vida

Marco Antonio Karam, presidente y fundador de la Casa Tíbet México dice que el ser humano tiene miedo a morir porque tiende a aferrarse a su familia y a las cosas materiales, además de ser un tema del que poco se conoce


NUEVO LAREDO.- Para comprender la muerte, primero es necesario entender la vida.
Así aborda Marco Antonio Karam, presidente y fundador de Casa Tíbet México, el tema de la muerte desde la perspectiva de la tradición budista, una práctica que propone la idea del renacimiento y contempla herramientas para prepararse para recorrer ese camino.
En entrevista con El Mañana, Marco Antonio Karam dijo que la muerte es uno de los temas centrales de la filosofía budista y el punto nodal en la existencia de los seres humanos.
A su llegada a esta frontera, en la que imparte el Seminario Muerte, Bardo y Renacimiento. Budismo Tibetano, Karam expuso que el ser humano tiene miedo de morir porque tiende a aferrarse a su familia, amigos, trabajo y a las cosas materiales, además de que es un tema del que poco conoce.
"Si seguimos las observaciones, no tan sólo de la tradición budista, sino de una buena parte de las tradiciones espirituales del mundo, se afirma que la vida precede a la conformación del cuerpo y subsiste a la desorganización del mismo, y con base en esto, el reto que todos nosotros tenemos es tratar de vivir nuestras vidas, conscientes de esa dimensión espiritual, aprovechando la misma y preparándonos para esa transición de morir", comentó.
Karam imparte este fin de semana en Laredo, Texas, el seminario mediante el cual los asistentes podrán reflexionar sobre el valor de la existencia y lo frágil que es ésta, así como entender la naturaleza de la vida y de la muerte.
"Lo primero que se pretende es que las personas ordinarias, como cualquiera de nosotros, seamos capaces de reconocer a la muerte como un suceso natural: el hecho de que todos los seres vivos están sujetos y expuestos evidentemente a la transición de morir, y a reflexionar en que la muerte no es del todo un hecho que nosotros podamos planificar, que suele naturalmente sorprendernos y que pertenecemos a una condición de vida en la que nuestro tiempo de existencia no es uno fijo", propuso.
"UN CADÁVER NO LLEVA BOLSAS"
El representante de Casa Tíbet México expone porqué la gente siente miedo a la muerte.
"Creo que hay muchas razones por las que una persona convencional teme al morir, una de ellas tiene que ver con el temor a lo desconocido, que no sabemos de qué trata la muerte, y como culturalmente hemos ido educados y condicionados a identificar a la vida y a la consciencia con nuestro cuerpo, naturalmente tenemos esa sensación", refirió.
Añadió que hay otras, como el aferramiento y el apego a todo lo que se abandona durante la transición del morir; el hecho de intuir que, si en efecto existe una continuidad de la vida después de la muerte, ésta estará ligada al desempeño vital actual en el que, probablemente, observe muchas deficiencias; y vivir sin un plan de vida en general.
"Hacer de la muerte un amigo, algo cercano, algo natural; no verlo como un enemigo, como algo artificial; también, comprender la naturaleza de la muerte; creo que una de las cosas que más angustia nos produce es que no sabemos mucho acerca de la muerte, de los procesos que acompañan al morir.
"Tememos morir, porque no hemos vivido del todo, porque a pesar de que estamos en el mundo, no estamos lúcidamente en él, y la vida se pasa tan rápido como un relámpago, y cuando transita con esa vorágine y vertiginosidad, a menudo uno descubre que ha vivido su vida de forma inconsciente, dominado por hábitos y tendencias, en piloto automático, ausente de genuina presencia, de voluntad y de consciencia, y que por tanto han sido los acontecimientos de la vida los que han dominado nuestra existencia, en lugar de nuestra voluntad por encima de éstos y de un plan de vida, en general", afirmó.
Ante la interrogante de cómo puede una persona común y corriente prepararse para morir, Karam dijo que el budismo tibetano ofrece varias posibilidades.
"Eso es algo que en la tradición budista se lleva a cabo a través de diferentes avenidas, preparativos intelectuales, preparativos contemplativos, éticos y morales, meditativos, todas diferentes sendas que pretenden familiarizar al individuo con la realidad y la inminencia de la muerte, con el valor de la vida y con la importancia de prepararse para poder transitar esa frontera de la mejor manera posible", añadió.
Dijo que el mejor de los candidatos para tener esta preparación, sería una persona que cuente con todas sus facultades, que pueda prepararse de manera consciente y que esté dotado de todas las condiciones favorables de la transición del morir.

"Hay una expresión muy popular en la cultura tibetana que dice que un cadáver no lleva bolsas", mencionó.
Entre las herramientas de preparación para el bien morir que ofrece la tradición budista está el familiarizar al individuo con el objetivo de la muerte, prepararse para la misma, sin tener que ser budista.
Añadió que dentro del ámbito de la tradición budista existe una costumbre antigua, pero actualmente relevante y eficaz de preparación en un entorno de hospicio, como lo hacen aquellas personas que transitan el morir y que ya se encuentran en una fase terminal, en el caso de los enfermos, que tienen la oportunidad de liberarse de los temores que los acompañan en esos momentos.
Hay una práctica de introspección contemplativa, dijo, muy popular dentro del ámbito del budismo tibetano, que se denomina la meditación de las tres raíces en torno al morir, en la que se pretende que el individuo se haga consciente de la inminencia de la muerte.
"Uno de los grandes maestros que trajo el budismo a la India en el siglo octavo decía que todos los seres vivos mueren, pero es interesante contemplar cómo finalmente nadie ha muerto", manifestó.
CUÁNDO SÍ Y CUÁNDO NO UNA MUERTE ASISTIDA
Desde la perspectiva budista, Karam expuso que la llamada muerte asistida no es aceptada cuando se trata de una especie de suicidio, pero sí está de acuerdo cuando tiene que ver con desconectar un aparato que mantiene con vida a alguna persona enferma y en fase terminal.
"Si por muerte asistida entendemos una especie de suicidio -el hecho de que el individuo tome su propia vida-, la tradición budista lo contemplaría como algo negativo, porque el valor fundamental es el valor de la vida…
"No obstante, en lo que la tradición budista se contempla como ético, como moral o edificante, es cuando también se sostiene o preserva la vida de una forma antinatural, a manera muy prolongada, en detrimento de la calidad de vida de la persona; eso quiere decir que si tenemos a una persona sujeta a un respirador o máquina de diálisis para mantener la vida otros dos años en coma, ahí sí la tradición budista consideraría como viable, la muerte asistida en el sentido de desconectar a la persona de estos medios artificiales de sustentación de la vida", explicó.
Habló también de la purificación a través de circunstancias en las que personas pasan por momentos difíciles de sufrimiento a causa de una enfermedad terminal.
"En el caso de que nosotros nos veamos obligados a confrontarnos con muy complejas circunstancias de muerte, quizá una enfermedad terminal que se prolonga de forma indefinida, la pérdida de nuestras facultades fundamentales, podría ser visto como algo negativo, como un proceso que denigra la integridad y el valor de la vida, pero en la tradición budista se contempla desde una óptica muy diferente: se plantea que los potenciales negativos resultantes de las acciones destructivas de mente, de palabra y de cuerpo que en la vida hemos ejecutado, maduran a través de estas enfermedades, y al madurar, estos conflictos vitales también se purifican", expuso.
Karam ahondó que hace algunos años, nuevos estudios e investigaciones vinculadas a la naturaleza de la consciencia en el estado de coma profunda o muerte vegetativa, han demostrado que hay consciencia aún en estos estados.
"Como hemos visto, hay eventos en los que las personas recuperan la consciencia, después de haberse visto en una coma profunda, inconscientes por períodos prolongados, a veces hasta de décadas, pueden mantener una vía muy primaria de comunicación, aún sujetos a deterioro cerebral progresivo -quizá pueden parpadear y tener dominio del parpadeo- y en especial ahora con nuevos instrumentos médicos, podemos analizar al cerebro en vivo.
"Aun las personas que aparentan estar limitadas por la muerte vegetativa, cuando son expuestas a un familiar y les habla de algo que les es conocido, el cerebro reacciona exactamente de la misma manera que lo haría si la persona estuviera sana y consciente.
Esto ha llevado a los neurólogos y fisiólogos que existe percepción y entendimiento en esos estados, lo cual los obliga a replantear los criterios con base en los cuales se plantea ejercer la eutanasia.
Sí es un tema escabroso, es un tema complejo", expuso.
¿CUÁNDO VOY A MORIR?
Marco Antonio Karam cree que la gente no desea tener consciencia en el momento de morir, porque piensa que de esta manera puede continuar con una vida inconsciente, en piloto automático, como él lo llama.
"Una persona que tiene conocimiento genuino, por ejemplo, de su vulnerabilidad, por ejemplo, una persona que sufre de una enfermedad terminal y sabe que le queda poco tiempo de vida, tiene una ventaja sobre de aquellos que no sabemos que somos mortales.
"Una persona de esta naturaleza se ve, por razones evidentes, obligada a replantearse lo que es importante y prioritario para su vida, quizá, a darse cuenta que muchos de los conflictos en los que invierte su energía y su vida, no valen la pena ante la inminencia del morir", dijo.
En contraste, añadió, la mayoría de la gente vive sujeta a una noción fantasiosa, que tiene que ver con la idea de que va a vivir para siempre.
"Eso nos hace desaprovechar en buena medida nuestras vidas. Yo no vería como algo malo el saber cuándo vamos a morir, quizá podría obligarnos a vivir, de alguna manera, y no, como decía la canción de Pink Floyd: "Vivir confortablemente adormecidos", apuntó.
Mencionó que la tradición budista es la que ha desarrollado de manera más completa y metódica la contemplación o meditación, y que ésta ha estado sujeta a investigaciones desde una perspectiva neurofisiológica por parte de importantes estudiosos, principalmente desde la década de los años 90.
Mencionó una investigación reciente sobre varios contemplativos tibetanos que moran en la transición del morir, a veces por varios días, máximo semanas, cuando técnicamente hayan muerto, y en los que el cuerpo no se descompone y no pierde calor, a pesar de que ya no tienen ritmo cardíaco, ni actividad cerebral.
"Desde hace varios años se había contemplado la posibilidad de observar a estos grandes contemplativos, desde una perspectiva científica, el transitar el morir, y con apoyo de la Universidad de Wisconsin y del Laboratorio de Estudios Neurofisiológicos del doctor Richard Davidson, se armó un par de equipos médicos en Los Himalayas, que tenían que estar listos para cuando un yogy de esta envergadura muriese y poderlo observar, con el aval y el apoyo de su Santidad el Dalai Lama", explicó.
Comentó que esta es la primera vez que se analiza científicamente este suceso que, dijo, valida a través de la ciencia el fenómeno del paso de la vida a la muerte.
EL DALAI LAMA
Marco Antonio Karam, comentó que el Dalai Lama canceló su visita a México, Estados Unidos, Alemania y a Suiza, como resultado de una crisis de salud que atravesó en los meses de septiembre y octubre y que culminó en una intervención quirúrgica, en la que se le removieron piedras de la vesícula.
"Tenemos la esperanza de que su Santidad el Dalai Lama vuelva a nuestro país en un par de años, quizá en el año 2010, pero no hay nada confirmado al respecto, todavía es muy temprano; ahorita, naturalmente están tratando de reorganizar su calendario, después de todo este período un poco difícil", manifestó.
Adelantó que en febrero del próximo año, llegarán a México una exhibición titulada "Reliquias del Tíbet", que consta de una de las colecciones más importantes del mundo.
Son objetos de veneración asociados a las grandes personas de la tradición budista que estarán en México, y una de las ciudades que las recibirá es Nuevo Laredo.
Las reliquias también estarán en la Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Querétaro.
El año pasado, cuando se trajo por primera vez a México, en los cuatro días que duró la exposición, fue visitada por más de 45 mil personas. En su próxima exhibición en México, se estima que atraiga a más de 70 mil personas.
"Esperamos que muchas personas tengan la oportunidad de visitar esta exposición, y también, recibir las bendiciones que tradicionalmente acompañan los restos y las reliquias de la tradición budista", exhortó Karam.

domingo, 30 de noviembre de 2008

El mundo al revés



El mundo funciona (mal) porque los hombres han inventado dos tipos de moral. La primera, que podríamos llamar la moral absoluta, está estrechamente vinculada a los elevados principios de la ética. La segunda, una especie de moralsecundaria, sirve para asegurar la viabilidad de una (presunta) civilización que, en los hechos, es esencialmente injusta, violenta y depredadora.

La moral absoluta es preconizada por esos idealistas que, en sus posturas de rebeldía e inconformidad, representan un colosal desafío al sistema —y a las supuestas buenas conciencias—, esos luchadores sociales que, en ocasiones, se acercan peligrosamente al radicalismo (o, por lo menos, su fastidiosa presencia significa tal reto al orden establecido que al resto de los comunes mortales no les queda otro remedio que asignarles la condición de “agitadores”).

La otra, la moral relativa, es el espacio que frecuentan los pragmáticos, los acomodaticios y, en general, la gente que administra los asuntos corrientes del planeta, es decir, los políticos. Concebido originalmente para tener aplicaciones prácticas, tal andamiaje de reglamentos es la consecuencia, por lo tanto, de concesiones, convenios y pactos celebrados, muchas veces, de manera hipócrita y ventajista. ¿Ejemplos? Muchos pero, sobre todo, esas prácticas corrientes en los ámbitos de la diplomacia que, con el pretexto de que la coexistencia pacífica entre las naciones merece el uso de ciertas amabilidades y prudencias, sacrifican el respeto a los principios morales más elementales. Y así, los dictadores y los caudillos autoritarios disfrutan del callado refrendo de una comunidad internacional de naciones cuyos líderes nunca llaman las cosas por su nombre sino que miran hacia el otro lado. En cuanto a los provechos, siempre van por delante de los escrúpulos: el Gobierno de España no comparte en lo absoluto los usos y costumbres, digamos, de un Hugo Chávez pero sus posibles objeciones se esfuman en cuanto se trata de venderle armas al aprendiz de tirano; el Gobierno de México, por su parte, se ha olvidado por completo de que el régimen cubano es dictatorial: más preocupado por guardar las formas y por perpetuar la política exterior de los antiguos priistas que por promover los valores de la democracia, guarda silencio ahí donde los opositores y los perseguidos de la isla esperarían una voz valiente.

Pero éstas son meras menudencias en un mundo marcado, antes que nada, por el infamante sello de la desigualdad y la injusticia, un universo de barbaries y salvajismos, un sistema global donde los niños mueren de hambre mientras la riqueza de las naciones se dilapida en armamentos. Sin embargo, estimados lectores, clamar abiertamente que vivimos una realidad global absolutamente inaceptable es una práctica muy poco frecuente. Mencionar la intrínseca monstruosidad del orden establecido te coloca, de inmediato, en el desprestigiado ámbito de los adolescentes, los alarmistas, los provocadores y, como decía, los radicales. Lanzar encendidas denuncias sobre la miseria no te hace una persona lúcida sino exaltada de la misma manera como acusar a los industriales de las armas o a los mercaderes de las corporaciones energéticas que están devastando el planeta no pasa de ser otra cosa que la molesta manifestación de un individuo “inadaptado”, “rebelde” o “resentido”.

Cómodamente afiliados a la moral secundaria, ignoramos deliberadamente los asuntos más perentorios de la Tierra. En este mismo momento, mujeres y niños de Congo están sufriendo estremecedoras atrocidades. Ayer, fue Ruanda. Mañana serán, de nuevo, Somalia o Darfur o Birmania. ¿A alguien le importa la presencia del horror en el mundo? A casi nadie. Los Gobiernos no se movilizan para rescatar a los inocentes y castigar a los culpables; tampoco parece asustarles demasiado la perspectiva de que el planeta se descomponga irremediablemente. El Hijo de Bush no se dignó a firmar el protocolo de Kioto. El pueblo libre y soberano de Estados Unidos quiere seguir comprando armas de alto poder que sirven, no lo olvidemos, para matar a seres humanos. Contaminamos ríos, destruimos bosques, ensuciamos mares y lanzamos millones de toneladas de sustancias tóxicas a la mismísima atmósfera que respiramos. Y, matamos, matamos y matamos. Todo el tiempo. Todos los días.

El futuro de la especie humana no pasa por el adormecimiento, el egoísmo y la comodidad. ¿O Sí?

Meditar puede ser tan efectivo como medicarse para combatir la depresión

(Embargada hasta las 00.01 GMT del lunes 1 de diciembre) Londres, 30 nov (EFE).- Meditar puede resultar tan efectivo o más que medicarse para hacer frente a la depresión, según un estudio realizado por la Universidad de Exeter (Reino Unido).

El estudio se ha basado en técnicas de meditación budista y su resultado es un tratamiento bautizado como "terapia cognitiva basada en la plena consciencia" (MBCT por sus siglas en inglés), que propone una alternativa natural a los antidepresivos químicos.

La meditación propone a los pacientes centrarse en su existencia presente, en vez de obsesionarse con el pasado y el futuro, afirmó el profesor Willem Kuyken, director del estudio, que publica este lunes la revista "Journal of Consulting and Clinical Psychology".

Kuyken, que trabaja en el Centro de Trastornos de la Conducta de la Universidad de Exeter, explicó que se escogió a dos grupos de personas con un largo historial depresivo, a uno de los cuales se trató con los medicamentos habituales y al otro con la terapia zen.

Ambos tratamientos se prolongaron durante ocho semanas, tras las cuales se dejó pasar un periodo de 15 meses al término del cual se constató que un 60% de quienes se trataron con antidepresivos habían recaído, frente a un 47% de recaídas entre quienes habían meditado.

El profesor Kuyken señaló que los antidepresivos "funcionan mientras se toman y son muy eficaces a la hora de reducir los síntomas de la depresión", pero añadió que "cuando la gente deja de tomarlos se es extremadamente vulnerable a una eventual recaída".

"La terapia MBCT propone un enfoque diferente; enseña a la gente habilidades prácticas. Lo que hemos demostrado con este estudio es que, cuando los pacientes se esfuerzan, estas habilidades de meditación les ayudan a mantenerse en buenas condiciones", aseguró.

Para Kuyken, se trata "de una opción viable para buena parte de las personas con esta enfermedad" y abre una vía mucho menos costosa para los servicios sanitarios, que podrían rebajar su factura farmacéutica y podrían tratar a más pacientes a la vez.

El estudio ofrece el testimonio de Di Cowan, un profesor de matemáticas de 53 años que tomó antidepresivos durante 15 años antes de unirse al grupo de meditación objeto del estudio.

Cowan explica que practica técnicas de meditación cuatro o cinco días a la semana, que le han ayudado "inmensamente".

"Me han procurado la capacidad para levantarme frente a cosas que antes me habrían derribado, pensar en cómo superarlas y obtener una solución para seguir adelante", indicó este paciente. EFE fpb/es

viernes, 28 de noviembre de 2008

Terapias alternativas en salud: Reiki


    UNO DE LOS GRANDES BENEFICIOS DE ESTA PRÁCTICA ES LA REDUCCIÓN DEL ESTRÉS 

             Terapias alternativas en salud: Reiki

 

El Reiki es un método de sanación natural que utiliza la energía vital universal, la cual permitiría sanar enfermedades físicas y mentales. Mikao Usui, un monje japonés fue quien desarrolló el Reiki durante un retiro espiritual a mediados del siglo XIX, aunque él siempre afirmó que únicamente "redescubrió" una técnica de sanación milenaria que ya existía pero que debía llevar mucho tiempo olvidada. El diario entrevistó a Anabel Verónica García Maestro Reiki certificado quien pertenece a la Asociación Argentina de Reiki Y nos acercó a esta terapia milenaria.

            “Es una terapia alternativa en que se trata de lograr la sanación a través del acercamiento de las manos del practicante hacia su objetivo, con el fin de transferirle la "energía universal", sostuvo Anabel García.

La medicina complementaria y alternativa, es el conjunto diverso de sistemas, prácticas y productos, médicos y de atención de la salud, que no se considera actualmente parte de la medicina convencional, como la acupuntura, la quiropráctica, el masaje y la homeopatía. La gente emplea terapias de medicina complementaria y alternativa de diversas formas. Cuando se usan solas se las suele llamar 

"alternativas". Cuando se usan junto con la medicina convencional, se las suele llamar "complementarias".

             

            ¿Que es Reiki?

                          

            Es llamado así a la energía espiritual que recorre a todos los seres vivientes. Podemos usar muchas formas de energía diferente. El método creado por Mikao Usui utiliza como materia prima a esta energía. En un principio, el sistema no era llamado Reiki. Recién después de su llegada a Occidente, a fines de los años treinta del siglo pasado, se lo identificó con el nombre de la energía que lo nutre. En realidad, el método creado por Usui sensei fue mas conocido como “Método para adquirir perfección personal”.

            Cuando nacemos a esta vida sobre la Tierra, nos encontramos con un estado físico, mental y espiritual de armonía con el universo. No hemos sido en ese momento todavía, reacomodados a un estilo de vida alejado de la Naturaleza. Con el paso del tiempo, nuestra conexión original se deteriora, no por ausencia de la energía que siempre nos 

está rodeando, sino porque olvidamos que necesitamos esa identidad con lo infinito, todo el tiempo.

            El método de Usui nos devuelve nuestra sintonía original y nos hace recordar con cada ejercicio de su práctica que cada día, nuestra vida debe estar en contacto con algo eterno.

                         REIKI

                         REI: Termino de la literatura japonesas.

                         KI: Es la energía universal. Se lo considera en elemento integral en la vida japonesa cotidiana.

            Muchas tradiciones japonesas se basan en una fuerte conexión con el KI, además de las artes marciales y el entrenamiento religioso. El éxito de la mundialmente famosa “ceremonia del té”, del antiguamente juego del GO y del arte de la caligrafía, también se basa en la capacidad que tiene el practicante para canalizar al KI que fluye libremente.

                                      ¿Cómo se realiza esta práctica?

                         La práctica del Reiki se fundamenta en un emisor o canal que, mediante sus manos, transmite Reiki (energía vital) a un receptor que puede ser él mismo u otra persona con el fin de paliar o eliminar molestias y enfermedades; no obstante, gracias a que Reiki es una energía universal los tratamientos también pueden dirigirse a otros seres vivos como animales e incluso plantas.

            Los efectos curativos del Reiki parten de los conocimientos hinduistas sobre los Chakras, mediante los cuales explican los estados de salud de los seres humanos. De esta forma, el mal funcionamiento o bloqueo de uno o varios Chakras provoca o agrava el mal estado de salud dando lugar a enfermedades y trastornos. La energía Reiki se dirige a estos chakras cuando se aplica a un receptor enfermo, desbloqueándolos y potenciando el proceso de recuperación del receptor.

            Aunque Reiki es una técnica de sanación, no se recomienda utilizarla como sustituto del tratamiento médico prescrito por un profesional, aunque sí se puede utilizar de forma complementaria.             

                         ¿Cuales son los Cinco Principios del Reiki?

                         El doctor Mikao Usui estableció una pauta de vida para el Reiki basada en los Principios del emperador Meiji, e invitó a sus alumnos a seguirla. Éstos son los Cinco Principios del Reiki:

                         Sólo por Hoy

            1.         No te enojes

            2.         No te preocupes

            3.         Demuestra aprecio

            4.         Trabaja duro (sobre ti mismo)

            5.         Sé bondadoso con los demás

                         ¿Cuales son sus beneficios?

                         Uno de los grandes beneficios del Reiki para su salud es la reducción del estrés. La reducción del stress dispara la capacidad natural que tiene el cuerpo para curarse y mejorar su salud. Los tratamientos de Reiki forman parte de un nuevo conjunto de terapias alternativas a la medicinal tradicional que trata de balancear de una manera sencilla y progresiva la energía vital y así disfrutar de más salud y bienestar en general.

                         ¿Quien puede iniciarse en Reiki?

            No existe límite de edad, ni distensión de sexo, religión, cultura, ni raza. Así como la energía vital universal está a disposición de cada uno de nosotros, también REIKI puede ser aprendido y trasmitido por cada uno de nosotros, independientemente de nuestras religiones y creencias.

            No se necesita de ningún conocimiento previo.

            Hasta los niños pueden iniciarse en Reiki, para poder trasmitir energía Universal, a las plantas, sus mascotas y a ellos mismos.

            Pero si hay que tener en cuenta que Reiki es una técnica que se enseña de Maestro a Maestro, por lo tanto debe iniciarte solo un Maestro certificado.

                         ¿Donde se puede recibir una terapia de Reiki?

                         En el Centro Budista Tibetano THUBTEN DHARGYE LING, Calle Canillas nº 22- 28002 MADRID, TF: 915 632 959.

Una vez al mes (Ver pag web: REIKI) se da “masaje tibetano” y masaje REIKI, por un módico precio, hay que solicitarlo en la secretaría del centro, TF: 915 632 959.

 El próximo fin de semana el 5 de Diciembre habrá una conferencia Pública sobre los "beneficios del REIKI" impartida por el maestro y monje budista Ven. Ngawang Wangllor (Vicente JLatre.).  Quien impartirá un curso de REIKI TIBETANO SHINE Nivel II los días 6 y 7 de Diciembre en el mismo centro para todos los que hayan recibido el nivel I

Es imprescindible la inscripción previa antes del 1 de Diciembre.

Horario: Sábado de 10:00 a 14:00 h y de 16:30 a 20:30 h
Domingo de 10:00 a 14:00 h

domingo, 23 de noviembre de 2008

Meditación entra a los hospitales

Meditación entra a los hospitales
Pensamientos que curan


Por: Pablo Correa
Científicos comienzan a dar la razón a los budistas: nuestra mente sí influye en el cuerpo. Pacientes con cáncer y enfermedades crónicas aprenden a pensar y sentir de otra manera.

Foto: Jupiter.Programas de meditación se han ido implementando para pacientes crónicos.
Dharamsala, una ciudad al norte de la India, es considerada por los tibetanos su segundo hogar. Tras la persecución china, un gran número de pobladores del Tíbet encontraron en este rincón de la cordillera de los Himalayas, un lugar tranquilo para vivir gracias a la condescendencia y protección del gobierno hindú.
En Dharamsala está ubicada la residencia de Tenzin Gyatso, el decimocuarto Dalai Lama, y desde 1987 el líder religioso abre las puertas de su hogar para albergar a destacados científicos y discutir con ellos posibles puntos de encuentro entre la milenaria tradición budista y los más recientes avances de la ciencia.
Como lo recuerda Sharon Begley, editora de la revista Newsweek en su libro Entrena tu mente, cambia tu cerebro (Editorial Norma 2008), la pregunta que ocupó la atención del Dalai Lama y su selecto grupo de invitados en 2004 fue la misma pregunta que ha atormentado a filósofos, médicos y hombres de ciencia por siglos: ¿Cuál es el poder de la mente para cambiar el cerebro?
Fred Gage, del Instituto Salk de la Jolla, California; Michael Meaney, de la Universidad de McGill de Montreal; Helen Neville, de la Universidad de Oregon, y Phillip Shaver de la Universidad de California, todos neurocientíficos que han desarrollado investigaciones en torno a la capacidad del cerebro para transformarse a lo largo de la vida (neuroplasticidad), examinaron desde su perspectiva una creencia que ha acompañado a los budistas por más de 2.500 años: la mente es una fuerza capaz de influir en el mundo físico, en nuestro cuerpo.
“Hay muchos paralelos evidentes entre los hallazgos neurocientíficos y la literatura budista”, resumió Francisca Cho, experta en budismo de la Universidad de George Washington y entrevistada por Begley, “el budismo es una historia en la que sentimos dolor y sufrimiento y tenemos el poder para cambiar eso. Los hallazgos científicos sobre la neuroplasticidad suponen un paralelo con la narrativa budista de la iluminación, porque muestran que aunque tenemos formas muy arraigadas de pensar y que el cerebro está parcialmente predeterminado, también tenemos la posibilidad de cambiar”.

Pero así como los budistas han abierto las puertas de sus templos para dialogar con los científicos, también un gran número de éstos han llevado a sus hospitales y consultorios las prácticas budistas. Uno de ellos es Steve Hickman, profesor de psiquiatría de la Universidad de California en San Diego.
Hickman coordina un grupo de meditación (mindfulness) para pacientes con enfermedades crónicas y cáncer en el Moors Cancer Center de San Diego, California. Los pacientes, además de recibir tratamientos convencionales, tienen la oportunidad de asistir a sesiones en las que Hickman los entrena para cambiar su forma de pensar. Como le explicó a El Espectador, este tipo de meditación apunta a que los pacientes descubran que “sólo tenemos este momento, el presente, sólo podemos actuar aquí. Cuando nuestra mente vive en el pasado o el futuro aparecen los problemas”.
Según Hickman, al juzgar cosas que no podemos cambiar añadimos estrés, miedo y ansiedad a nuestras enfermedades empeorando su pronóstico. En un libro aún por publicar, Hickman recuerda el caso de uno de sus pacientes, ex futbolista y hombre de negocios, quien batalló por años con un dolor crónico e incapacitante: “Siempre había sido un luchador. Fui jugador de fútbol y triunfé en los negocios siendo fuerte y competitivo, y cuando me lesioné y el dolor persistía a pesar de las múltiples cirugías, seguí luchando contra él. Después de practicar la meditación, encontré que en vez de pelear con el dolor, podía danzar con él. Eso fue increíble!”.
Estudios de la Universidad de Massachusetts, donde se desarrolló el programa que Hickman aplica, han demostrado que en los pacientes que practican meditación se activan zonas de la corteza cerebral asociadas al control de emociones como la ansiedad y mejoran algunos parámetros de su sistema inmunológico.
La conexión mente-cuerpo
Ariel Alarcón, psiquiatra de la Clínica de Marly, y quien ha implementado un programa de psicoterapia para pacientes con cáncer, no duda en los beneficios derivados de prácticas como la meditación y terapias cognitivas. Hace unos meses, sus colegas del área de nefrología lo buscaron para relatarle el caso de un paciente que había sido trasplantado y para asombro de todos, no tomaba ciclosporina, el medicamento indicado para mantener bajo control al sistema inmunológico y evitar el rechazo del órgano trasplantado.
“Hablé con el paciente y me contó que hacía meditación trascendental. Según él, de esa manera evitaba que su cuerpo rechazara el riñón, pero en las épocas en que dejaba de meditar, su cuerpo comenzaba a rechazarlo”.
Más allá de este caso anecdótico, Alarcón ha estado interesado por las investigaciones de un colega suyo en Canadá, Alastair Cunningham, del Ontario Cancer Institute. Cunningham ha sido un abanderado en las investigaciones que intentan establecer un puente entre nuestros pensamientos, creencias y emociones y el curso de enfermedades como el cáncer.

“En un grupo de 30 a 40 pacientes con cáncer que practicaron ejercicios de autoconciencia y técnicas para reducción del estrés, el equipo de Cunningham logró probar que ocho alcanzaron tasas de sobrevida superiores a las esperadas”, comenta Alarcón.
¿Cuál es el camino que recorren nuestros pensamientos para impactar positivamente nuestra salud? Ahí está el rompecabezas que los científicos aún no logran armar (ver recuadro). En palabras de Alarcón “la investigación es muy compleja, porque no están claras las vías moleculares a través de las cuales ocurre ese fenómeno, la interacción entre nuestro cerebro y sistemas como el inmunológico y el endocrino”.
Efectos de la meditación en el cuerpo
Alberto Pérez de Albéniz y Jeremy Holmes, psicoterapeutas del North Devon General Hospital en el Reino Unido, publicaron en el año 2000 un estudio en el que recopilaron la evidencia científica sobre los efectos de la meditación en el cuerpo.
Mayor actividad cardiaca
Relajación muscular
Interrupción de la producción de C02 en los músculos
Aumento de la circulación sanguínea en el cerebro
Disminución de flujo sanguíneo en el hígado y los riñones
Menor frecuencia respiratoria
Intensidad de ondas alfa en las regiones centrales y frontales del cerebro, así como una mayor activación del hemisferio derecho al que se le atribuyen cualidades espaciales, intuitivas y no verbales
Incrementos del pH de la sangre durante la meditación y una reducción después de ésta
Descenso en el lactato plasmático
Cambios en los patrones del metabolismo de la glucosa
Disminución de la actividad adrenocortical y menor secreción de cortisol (la hormona del estrés)

En el estado de la luz clara, por 18 días

Dharamshala.- Los médicos e investigadores en el Monasterio Drepung se deslumbraron al presenciar el curioso espectáculo en el asentamiento tibetano al sur de India en Mungod. Su eminencia Lobsang Nyima, el anterior Gaden Tripa, quien falleció el 14 de septiembre, estuvo en el estado de Thukdham por 18 días, hasta el 1º de octubre.
Thukdham, según la práctica tántrica budista tibetana, se explica como un estado en el que un lama o meditador altamente preparado con su práctica de meditación de toda una vida, puede entrar en la meditación del ‘Estado de Luz Clara’, un proceso último de disolución interior de los cinco elementos y la conciencia. Los practicantes, durante el Thukdham, pueden controlar el proceso de descomposición del cuerpo y mantener el calor interno de éste.
Tenzin Namdul, un médico tibetano en Men-Tsee-Khang, y el Dr. Yangzom Dolker del Hospital Delek, fueron enviados a Mundgod al sur de India para investigar científicamente el efecto de Thukdham en el cuerpo de Trisur Rinpoche. El proyecto Thukdham se inició en diciembre pasado en colaboración con el laboratorio de imágenes cerebrales del Dr. Richard Davidson en la Universidad de Wisconsin bajo la guía de Su Santidad el Dalai Lama, cuenta el Dr. Namdul. Los doctores midieron el efecto del Thukdham en el cuerpo del Rinpoche mediante el EEG, ECG y la temperatura del cuerpo usando el último equipamiento científico.
Los tibetanos al igual que los indios atestaron Drepung en busca de la bendición del Rinpoche. Un equipo de investigadores y científicos de la Fundación de Investigación del Yoga de Swami Vivekananda de Bangalore llegó a atestiguar lo que luego llamaron un “avance científico en el efecto de la meditación intensiva”. Otro equipo de médicos y neurocientíficos del Hospital Kles Prabhakar Kore de Belgaum también llegaron a atestiguar el suceso.
“Los médicos comentaron que esto es algo que necesitan ver para creer y ahora que lo han visto, dijeron que están simplemente sorprendidos y sin habla. Ambos expresaron un fuerte deseo de iniciar un proyecto en colaboración sobre este importante y complejo asunto”, dijo el Dr. Namdul.
Algunos dicen que un mayor período de meditación prolongará el arribo de su reencarnación. El Dalai Lama solicitó a los asistentes de Gaden Trisur que permitieran que la meditación continuara. Antes, el líder tibetano había dicho que los científicos deben examinar el estado de Thukdham en los maestros y lamas tibetanos.
Bajo la guía del Dalai lama, el cuerpo de Trisur Rinpoche será momificado de manera que las personas puedan contar con su presencia y ser bendecidos por ella, indicó el Dr. Namdul.

jueves, 13 de noviembre de 2008

El Dalai Lama habla con científicos de la salud mental

El Dalai Lama habla con científicos de la salud mental

escrito por THE OFFICE OF TIBET, NEW YORK   

El Dalai Lama, jovial líder de millones de budistas en todo el mundo y quien cree que el propósito de la vida es ser feliz, se reunió con científicos el sábado para discutir cómo el estrés puede afectar la salud.

El monje de 71 años, vestido con ropas tradicionales, respondió a preguntas de tres destacados científicos que trabajan en áreas relacionadas a la salud mental. 

Entre ellos estaba el científico de los famosos, Deepak Chopra, quien observó que la creciente violencia y los ataques terroristas están intensificando el anhelo mundial por la paz. 


El Dalai Lama contestó que el estrés al inicio de la vida, causado por pobreza o abuso, induce emociones negativas como miedo, envidia y rabia, que luego se transforman en violencia.

El Dalai Lama cree básicamente que la paz mundial empieza con la paz interior, la tolerancia y la compasión. 

Dijo que una vez que las personas desarrollan la compasión, un diálogo más significativo puede llevarse a cabo, lo que en última instancia lleva a un mundo menos violento.

"Para comprender "el diálogo significativo", uno primero debe entender los intereses de los demás y respetarlos como sus hermanos y hermanas, además de considerarlos como parte de uno mismo", dijo. 

Mencionó que las personas deberían observar el ejemplo de una madre dedicada para entender la verdadera compasión.

En un punto, Chopra, quien estudia la conexión mente-cuerpo en relación con la buena salud y estuvo muchas veces en el programa de Oprah Winfrey, preguntó al Dalai Lama si se alcanzaría la paz mundial al valorar la sociedad de mejor forma la profesión de la maternidad. 

El Dalai Lama soltó una risita, rascó su cabeza y respondió "Si, esto es bueno".

"El tiempo es la respuesta para manejar la violencia que surge del odio y el miedo, así es que debemos tener compasión para generar más humanidad". 

Afirmó creer que hasta un niño que sufrió abuso podría curarse al aprender cómo cambiar su punto de vista negativo por uno positivo.

"Hagan el esfuerzo. Trabajen duro. Sean unidos. Creo que ustedes deberían saber que tienen la responsabilidad de trabajar en conjunto", dijo a un auditorio repleto en el Orpheum Theatre de Vancouver. 

El psiquiatra Alan Young, director asociado del Instituto para Salud Mental de la Universidad de British Colombia preguntó al Dalai Lama por sus ideas acerca de las semejanzas entre la compasión y la cura de la enfermedad mental. 

Él quería saber por qué, al parecer, las personas sienten menos compasión por personas con trastornos mentales que por aquellas que tienen deficiencias físicas.

"Sería un escándalo si alguien con cáncer tuviera que dormir en la calle, pero por qué no es así cuando se trata de alguien con esquizofrenia?", dijo Young. 

"No lo sé", contestó el Dalai Lama, mencionando que el Centro sería un buen lugar para investigar más sobre por qué las personas se enferman a raíz de la depresión y por motivos aparentemente insignificantes.
  
El Dalai Lama viajó a Vancouver por el fin de semana para inaugurar un nuevo Centro para la Paz y Educación,y concluyó su visita el sábado en la noche ante una multitud de 14.000 personas en el GM Place.

El alcalde Sam Sullivan y el Ministro de Ciudadanía e Inmigración, Monte Solberg, comparecieron para entregar al Dalai Lama la Ciudadanía Canadiense Honorífica cuyo otorgamiento fue votado en forma unánime por el Parlamento a principios de año. 
 
Se trata solamente de la tercera vez que este honor es otorgado. El líder sudafricano Nelson Mandela y el diplomático sueco Raoul Wallenberg, quien salvó judíos de la exterminación durante la Segunda Guerra Mundial, ambos recibieron esta distinción. 

"Su Santidad, si Ud. conoce un poco nuestro Parlamento, Ud. sabrá que solo acordamos algo de manera unánime", dijo Solberg.  "Manifiesta y abiertamente, Ud. ha tenido la habilidad de unir a las personas".

La ciudadanía honorífica provocó una fuerte oposición por parte de China, que advirtió que el gesto podría dañar las relaciones. 

El Departamento de Asuntos Exteriores manifestó que Canadá reconoce a China como el gobierno legítimo de ambos China y Tíbet, pero que tiene un gran respeto por el Dalai Lama.

Él huyó al exilio en el Norte de India en 1959, después de un levantamiento fallido contra el gobierno chino, pero continua siendo ampliamente reverenciado en Tíbet. 
 
Después de la ceremonia, tuvo la palabra el Dalai Lama, quien habló sobre cómo cultivar la felicidad.

"Siento que para lograr una vida feliz y exitosa, esto depende en gran parte del enfoque mental", dijo, mientras estaba sentado con las piernas cruzadas en un sofá sobre el escenario.  "Creo que el dinero, el poder y hasta la salud son secundarios. Cuando el estado de la mente está en calma, en paz, entonces, ustedes pueden realmente disfrutar la vida." 

Acerca del autor:
La Oficina de Tíbet en Nueva York, es la agencia oficial de Su Santidad el Dalai Lama y del Gobierno Tibetano en Exilio para las Américas.  La oficina fue establecida en 1964, con la misión de representar al Gobierno Tibetano en Exilio en las Américas, además de proveer servicios para la comunidad tibetana en las Américas, esto con el objeto de preservar la singular cultura y la herencia espiritual de Tíbet, así como el de ayudar a los tibetanos en su lucha por los refugiados. 

El yoga es más efectivo que los fármacos para el insomnio

Un mal que afecta a muchos
El yoga es más efectivo que los fármacos para el insomnio
Recientes estudios coinciden en que esta disciplina, al igual que otras técnicas de relajación y que la terapia.

La ciencia es terminante al delimitar las consecuencias del insomnio: alteración del humor, dificultad para pensar y concentrarse, pérdida de reflejos (y el consiguiente riesgo de accidentes), depresión, cefaleas, dificultades motoras y cognitivas que ponen en juego la calidad de vida y el funcionamiento social. 

Sin embargo, el consenso se resquebraja a la hora de unificar estrategias terapéuticas. De un lado, quienes apelan a la psicofarmacología con su múltiple caudal de opciones (hipnóticos, antidepresivos, relajantes musculares, ansiolíticos), al que se suman opciones más naturales (valeriana, melatonina, tilo, pasiflora). Del otro, quienes defienden las alternativas más naturales: yoga, meditación, técnicas de relajación, dieta, terapia cognitiva, control de estímulos. 

En el centro de la escena, los insomnes, inmovilizados por la falta de certezas y sueño.

Recientemente, un equipo de investigadores de la Universidad de Bergen, Noruega, comparó los efectos de un medicamento utilizado con frecuencia por su efecto hipnótico y ansiolítico, con un variado conjunto de opciones no farmacológicas en 46 adultos con insomnio crónico. 

Los participantes del estudio designados a la vertiente naturista aprendieron a fijar horarios para acostarse y levantarse, a reconocer los estímulos que retrasan el sueño, como la presencia de la TV o la computadora en el cuarto, y a practicar técnicas de relajación progresiva que ayudan a convocar al sueño. Con estas medidas lograron reducir las interminables horas que pasaban despiertos con más eficacia que quienes recibieron el psicofármaco durante los seis meses que duró la investigación, según resultados del estudio vertidos en JAMA, publicación oficial de la Asociación Médica Americana, de Estados Unidos. 

En busca de quietud mental

Un estudio coordinado por Margarita Blanco, jefa de Medicina del Sueño del Hospital Francés, indagó la relación entre la dieta y el sueño en 400 personas de la ciudad de Buenos Aires. "La mayoría distribuía sus comidas de forma irregular, priorizando la cena sobre el desayuno, y el tiempo entre la cena y la hora de acostarse fue menor a dos horas, factor que no favorece la calidad de sueño", concluyeron los investigadores. 

Y proponen "hacer un desayuno importante, un almuerzo normal y una cena liviana, manteniendo un tiempo de dos horas y media hasta la hora de acostarse, para mejorar la calidad de sueño de los insomnes".

Margarita Blanco, también directora de la Red de Medicina del Sueño, agrega que a la buena alimentación hay que sumar organización horaria y otro aspecto habitualmente desconsiderado por la vasta población de insomnes: la necesidad de salir de la carrera existencial contra el tiempo. 

"Muchas personas con trastornos del sueño no reconocen los efectos negativos de una vida muy agitada, sin períodos de reposo durante el día y tampoco valoran la importancia de hacer ejercicios de relajación en lugar de actividades excitantes en las últimas horas del día." 

La quietud mental es uno de los pilares del buen sueño, y la práctica de yoga es un camino que ayuda a alcanzar la ansiada armonía interior, aliada del sueño. "El primer paso para ganarle al insomnio es cambiar de actitud", recomienda David Lifar, director de la Fundación Indra Devi. 

"En lugar de centrar la preocupación en el sueño que se está perdiendo hay que procurar no molestarse ante esta situación, darse un baño de inmersión o una ducha tibia que favorezca la relajación, practicar durante el día ejercicios de respiración, escuchar música relajante, masajear las zonas tensionadas del cuerpo y practicar ejercicios suaves de cuello y hombros o algunas posturas de yoga." 

De hecho, la práctica de yoga ha demostrado eficacia en el control del estrés, enemigo público número uno del sueño. Un estudio reciente publicado en el Indian Journal of Phisiology and Pharmacology demostró que en apenas diez días los niveles de ansiedad se reducen considerablemente a través de un programa que incluye la práctica de yoga y meditación. 

Otro estudio indagó el efecto de la repetición silenciosa de mantras -palabras o frases con un sentido espiritual- en el control del estrés y concluyó que esta práctica mental, corporal y espiritual es eficaz para reducir el estrés y controlar el insomnio. 

David Lifar propone practicar yoga y meditación como caminos que conducen a la paz de la mente, "instrumento de vital importancia para reducir el impacto del estrés" y conciliar el reparador sueño

Historia del Tíbet antes de la invasión china de 1.949

Historia del Tíbet antes de la invasión china de 1.949

Rebaños y caravanas de yaks

El Tíbet tiene una historia que data de más de 2.000 años. Un buen punto de partida para poder analizar el estatus del país es el periodo referido como la "Edad Imperia l", cuando todo el Tíbet fue por primera vez unificado bajo el poder de un solo soberano. No hay discusión posible sobre la existencia de un estado independiente durante este periodo. Incluso los registros históricos de China y los tratados que China y el Tíbet firmaron durante este periodo se refieren al Tíbet como un estado poderoso al que China se veía forzada a tratar en un plano de igualdad.

¿ En qué punto de la Historia, entonces, dejó el Tíbet de ser un estado independiente y se convirtió en parte integral de China, como los comunistas quieren hacer entender ?

La historia del Tíbet no es diferente de la historia de otros paises. Hubo épocas en las que el Tíbet extendió su influencia sobre los territorios y las gentes de sus alrededores, y hubo otros periodos, en los que se dejó influir por ideas o gobernantes extranjeros... Los Khan de Mongolia, los ghorkas de Nepal, los emperadores manchúes, y los gobernadores británicos de la India.

Se debe hacer notar, antes de examinar la historia relevante, que las Leyes Internacionales son un sistema creado por los estados principalmente para su propia protección. A resultas de esto, la Ley Internacional protege la independencia de los estados de intentos de drestruirla y, de ahí, la presunción es la de continuar con la continuación del estatus anterior. Esto significa que, cualquier estado independiente, que haya existido durante siglos, como el Tíbet, no tiene necesidad de probar su independencia continuada, cuando esta se vea amenazada, o cuando un país extranjero reclame derechos de soberanía sobre él, demostrando en qué preciso momento, y por qué medios legales éstos fueron adquiridos.

Las reclamaciones que China hoy en día presenta, están basadas enteramente en la influencia que los mongoles y los emperadores manchús ejercieron sobre el Tíbet en los siglos XIII y XVIII, respectivamente.

Según el Imperio Mongol de Genghis Khan se extendía hacia Europa por el oeste, y ocupaba China en el este, allá por el siglo XIII, los líderes tibetanos de la Escuela Sakya del Budismo Tibetano concluyeron un acuerdo con los regentes mongoles con la intención de evitar la de otra manera inevitable invasión del Tíbet. En el, se prometía lealtad política, bendición y enseñanza, a cambio de protección. La relación religiosa llegó a ser tan importante, que cuando Kublai Khan conquistó China, y estableción la dinastía Yuan, mandó llamar al Sakya Lama para hacerlo Preceptor Imperial y Pontífice Supremo de su Imperio.

La relación que se desarrolló, y que aún hoy existe, entre los mongoles y los tibetanos, es un reflejo de la afinidad racial, cultural, y especialmente religiosa de estos pueblos del Asia central. Reclamar, como los chinos actuales hacen, que el Tíbet fue parte de China porque ambos paises fueron independientemente sujetos a diferentes grados de control mongol, es absurdo. El Imperio Mongol fue un imperio a escala intercontinental. No existe ninguna evidencia que indique que los mongoles integraran la administración de China y Tíbet o anexionaran Tíbet a China en ninguna manera. Esto sería como reclamar que Francia debería pertenecer a Inglaterra porque ambos paises sufrieron la dominación romana, o que la Birmania es una parte de la India desde cuando el Imperio Británico extendió sus dominios sobre ambos territorios.

Este periodo de breve dominación extranjera sobre el Tíbet ocurrió hace 700 años. Tíbet rompió con el emperador Yuanantes de que China reganara su independencia de los mongoles, con el establecimiento de la dinastía nativa de los Ming. Solo hasta el siglo XVIII, no sufriría el Tíbet la influencia extranjera en algún grado.

La dinastía Ming, que gobernó en China desde 1.368 hasta 1.644, mantuvo pocos lazos y ninguna autoridad sobre el Tíbet. De otra parte, los Manchús, que conquistaron China y establecieron la dinastía Qing en el siglo XVII, abrazaron el Budismo tibetano, como lo habían hecho los mongoles, y desarrollaron estrechos lazos con los tibetanos. El Dalai Lama, que por entonces era el gobernador temporal y espiritual del Tíbet, accedió convertirse en el guía espiritual del emperador Manchú, aceptando su protección a cambio. Esta relación de "patrón - confesor", que el Dalai Lama mantuvo con los mongoles y con muchos nobles del Tíbet, fue de hecho, el único lazo formal que existió entre tibetanos y manchús durante la dinastía Qing. Y no afectó, por si misma, a la independencia del Tíbet.

En el plano político, algunos emperadores manchús poderosos lograron con éxito aumentar su grado de influencia sobre el Tíbet. Así, entre 1.720 y 1.792, los emperadores Kangxi Yong Zhen y Qianlong enviaron tropas imperiales al Tíbet en cuatro ocasiones para proteger al Dalai Lama y a su pueblo de invasiones extranjeras o contra la inestabilidad interna. Fueron estas acciones las que confirieron a los emperadores citados un mayor grado de influencia sobre el Tíbet. Los emperadores mandaron a la capital tibetana, Lhasa, a un representante imperial, que en ocasiones llegó a influir sobre el gobierno tibetano a favor del emperador, particularmente en lo concerniente a las relaciones exteriores. A lo más alto del poder manchú, que duró unas pocas décadas, la situación no fue diferente a la que pudiera existir entre una superpotencia y su protectorado. La sujeción de un estado a una influencia extranjera, e incluso la intervención en sus asuntos internos, aunque pudiera ser politicamente significativa, no supone de ninguna manera, por sí misma, la extinción legal de aquel estado. Consecuentemente, aún cuando algunos emperadores manchús ejercieron una considerable influencia sobre el Tíbet, nunca incorporaron al Tíbet a su Imperio, y mucho menos a China.

La influencia manchú no duró mucho tiempo. Quedó sin efecto en la época en que los británicos invadieron por breve tiempo el Tíbet, en 1.904, y cesó totalmente con el abandono de la dinastía Qing en 1.911, y su reemplazo en China por un gobierno nacional republicano. Cualquier lazo existente entre el Dalai Lama y los Qing quedó extinguido con la disolución del Imperio Manchú.

1911 - 1950

Desde 1.911 hasta 1.950, el Tíbet supo evitar toda influencia extranjera indeseada, y se comportó, en todos los aspectos, como un estado completamente independiente. El XIII Dalai Lama enfatizó el estatus de independencia de su país en el exterior, en comunicaciones oficiales con gobernantes extranjeros, e internamente, publicando una proclamación que reafirmaba la independencia del Tíbet, y reforzando la Defensa Nacional. Tíbet permaneció neutral durante la Segunda Guerra Munfial, a pesar de las grandes presiones de China y sus aliados, Inglaterra y los Estados Unidos. El Gobierno Tibetano mantuvo relaciones internacionales independientes con todos los paises vecinos, muchos de los cuales tenían representantes diplomáticos en Lhasa.

La actitud de la mayoría de los gobiernos extranjeros con los que el Tíbet mantenía relaciones, implicaba el reconocimiento de la independencia del Tíbet. El mismo Gobierno Británico se inclinó a no reconocer la soberanía o cualquier otro derecho de China sobre el Tíbet, a menos que China firmara el borrador de la Convención de Simla de 1.914 con Inglaterra y Tíbet, cosa que los chinos nunca hicieron. El reconocimiento del Nepal fue confirmado por el Gobierno Nepalés en 1.949, en documentos presentados en las Naciones Unidas en apoyo a convertirse en miembro de la ONU.

El punto de inflexión en la historia del Tíbet, llegó en 1.949, cuando el ejército de Liberación Popular de la República Popular de China cruzaron la frontera y entraron en el Tíbet. Después de batir al pequeño ejército tibetano, el gobierno chino impuso el llamado "Acuerdo de los 17 Puntos para la Liberación Pacífica del Tïbet" al gobierno tibetano, en mayo de 1.951. Al haber sido firmado bajo presión, este acuerdo es ante las leyes internacionales inválido. La presencia de 40.000 soldados en el Tíbet, la amenaza de una ocupación inmediata de Lhasa y la perspectiva de la destrucción total del Estado Tibetano, dejan a los tibetanos poco margen de elección.

Se debe hacer notar que numerosos países hicieron declaraciones en el curso de los debates de la Asamblea General de la ONU que siguieron a la invasión del Tibet que reflejaron su reconocimiento de la condición del Tíbet independiente. Así, por ejemplo, el delegado de las Filipinas declaró:

"...es claro que sobre la víspera de la invasión en 1.950, Tibet no estaba bajo la regla de ninguno país extranjero."

El delegado de Tailandia recordó a la asamblea que la mayoría de estados

"...reprueban la idea de que Tibet es parte de China."

Los Estados Unidos se unieron a la mayoría de los otros miembros de la ONU en condenar la "agresión" e "invasión" china del Tibet.

En el curso de los 2.000 años de la historia del Tíbet, el país sufrió algún grado de influencia extranjera solo por cortos periodos de tiempo en los siglos XIII y XVIII. Pocos paises independientes hoy pueden presumir de un registro tan impresionante. Como resaltó el embajador de Irlanda en las Naciones Unidas durante los debates de la Asamblea General sobre la cuestión del Tíbet:

"... por miles de años, o, a lo largo de un par de milenios, [Tíbet] fue tan libre y tan completamente capaz de controlar sus propios asuntos como cualquier otra nación en esta Asamblea, y mil veces más libre para cuidarse de sus asuntos que cualquier otra nación aquí..."

Desde un punto de vista legal, Tibet, al día de hoy, no perdido su estatus quo. Es un estado independiente bajo una ocupación ilegal. Ni la invasión militar de China ni la ocupación continua ha transferido la soberanía de Tibet a China. Como se ha indicado anteriormente, el gobierno Chino nunca ha sostenido haber adquirido la soberanía sobre el Tibet por una conquista. Desde luego, China reconoce que el uso o la amenaza de fuerza (aparte las circunstancias excepcionales previstas en la Carta de la ONU), la imposición de un tratado desigual o la ocupación ilegal continuada de un país nunca puede otorgar al invasor un título legal sobre el territorio. Sus reclamos se basan únicamente sobre el alegados Sus reclamos se basan únicamente sobre la supeditación alegada del Tibet a unos gobernantes extranjeras más poderosos en los siglos XIII y XVIII. ¿ Si los otros países fueran a presentar tales reclamos tenues solo en base en su pasado imperial, cómo de serios serían tomados ? ¿ No estamos nosotros, incluso cuando consideraramos los méritos de los argumentos de China, aceptando el derecho de los gobernantes modernos y poderosos a invadir un pais extranjero solo con la intención de restaurar imperios perdidos por sus antepasados ?


[Michael C. van Walt is an international legal scholar and a board member of the International Campaign for Tibet. Reprinted from the Cultural Survival Quarterly. Vol.12 1988 Number 1]

Historia del Tíbet desde la invasión china

Indice Historia del Tíbet, Política, Situación Legal